Se lo considera uno de
los más grandes narradores de historias infantiles del siglo xx.
El ilustrador, Quentin
Blake
Su dibujo es claramente
identificable por su espontaneidad y aparente sencillez.
Jorge está tan harto de su abuela que decide prepararle una nueva medicina tan fuerte y tan explosiva que «o la cura completamente o le volará la cabeza». El chico inventa una extraña poción, un cóctel disparatado. La abuela lo bebe e inmediatamente empieza a crecer y crecer, hasta que atraviesa con la cabeza el tejado de la casa.
El padre de Jorge piensa, entonces, que si los animales de su granja toman la medicina mágica serán animales gigantes, y pide a Jorge que prepare más. Pero Jorge no recuerda bien los ingredientes y realiza unas pociones que no resultan exactamente como esperaba. Tanto es así que, en el último intento, el efecto es justo el contrario: empequeñecer a quien la tome. La abuela, entusiasmada por el resultado de la primera medicina, prueba esta nueva pócima. Pero bebe una dosis desmesuradamente grande y se hace cada vez más pequeña hasta que, finalmente, para tranquilidad de todos, desaparece.
Se trata de una novela sencilla, directa, llena de sentido del humor y situaciones disparatadas que atraparán al lector desde la primera página.